Shuumatsu no Valkyrie Wiki
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Helheim (ヘルヘイム, Heruheimu ?) También referido como el Inframundo o el Infierno. Es el reino donde residen los demonios y es actualmente gobernado por Hades.



Descripción[]

El Helheim es la tercera capa en la cual se divide el mundo siendo el hogar de seres malignos y criaturas sobrenaturales. Pese a que es un lugar habitado mayoritariamente por demonios el Helheim actualmente se encuentra gobernado por el dios Hades.

Historia[]

La fuga de los titanes[]

Después de que Cronos fuera derrotado y asesinado por Zeus en el torneo de la titanomaquia, los titanes subordinados de Cronos fueron encerrados en el Tártaro, prisión del Helheim. La diosa Gaia se negó a aceptar que Zeus gobernara el Olimpo por lo que comandó un ejército de gigantes para destruir a sus nietos, es entonces que los titanes aprovecharon la oportunidad para escapar de su prisión y dirigirse también al Olimpo sin embargo Hades asesinó por si mismo a todos los titanes que intentaron salir del Helheim, frustrado así la fuga de estos.

La Gran Guerra[]

Hace mucho tiempo ocurrió una guerra entre el Valhalla y el Helheim. Tal conflicto llevó a la creación del Bifröst, un portal que une a ambos reinos y con el fin de evitar futuros ataques entre estos el acceso a este fue limitado exclusivamente a los dioses superiores como lo son Zeus, Odín, Shiva y Hades. Además de esto, se tiene como regla que cualquiera que se atreva a usar el Bifröst sin autorización y e ingrese en el Helheim no le será permitido volver al Valhalla.

La leyenda del Rey Demonio del Sexto Cielo[]

De acuerdo con las palabras de Hades en el Helheim existe una leyenda popular la cual dice: "Cuando la luz más brillante se mezcle con la sombra más oscura, los cuernos del inframundo despertarán y darán vida a la oscuridad eterna; mejor conocido como el Rey Demonio del Sexto Cielo de las Papiyas."

La Ira de Papiyas[]

Hades comenta que según las leyendas las Papiyas destruyeron la mitad de todo el Helheim por si solo para después desaparecer misteriosamente sin dejar ningún rastro.

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